COOKIES de ESPELTA INTEGRAL, AVENA y CHOCOLATE

Mis hijos son adictos a las galletas, no hay cosa que les guste más. Les pirran las galletas, he conseguido mejorar mucho lo que comen en el desayuno y aunque sólo les compro un paquete de galletas industriales una vez al mes, es una de las cosas que quiero eliminar totalmente de nuestra lista de la compra.



He ido sustituyendo el cacao del desayuno por cacao de verdad con un poco de canela y azúcar, toman crema de avellanas y cacao casera, casi no compro yogures de sabores y los zumos han desaparecido totalmente de la dieta, pero las galletas, eso es otro cantar. Aunque viendo el éxito que ha tenido esta receta creo que lo voy a conseguir, he hecho estas galletas dos veces en tres días y prácticamente no quedan, así que vamos en el buen camino.

INGREDIENTES:

• 300 gr de harina de espelta integral
• 45 gr de copos de avena
• 1/2 cucharadita de levadura en polvo tipo royal
• 50 gr de azúcar moreno
• 100 gr de chips de chocolate negro (70 % de cacao)
• 125 ml de aceite de oliva suave
• 100 ml de sirope de agave
• 1 huevo
• Una cucharadita de esencia de vainilla.

ELABORACIÓN:

Precalentamos el horno a 180 º calor arriba y abajo.

En un bol ponemos la harina, la avena, la levadura, el azúcar y el chocolate, lo mezclamos bien. Hacemos un agujero en el centro y añadimos el aceite, el sirope, la vainilla y el huevo, mezclamos bien hasta obtener una masa homogénea.

Formamos bolas de masa del mismo tamaño, las aplastamos un poco y las colocamos separadas sobre una bandeja de horno forrada con papel de hornear.

Horneamos entre unos 12 a 15 minutos dependiendo del horno, hasta que estén ligeramente doradas. Dejamos enfriar completamente en una rejilla antes de consumir.


NOTAS:

Podéis ver en instagram stories como consigo que salgan más o menos todas iguales, fundamentalmente es gracias a este dosificador de masa, que también uso para hacer las albóndigas ;-).

La bandeja tiene que estar fría, antes de entrar en el horno, yo tengo varias para poder ir haciendo tandas, pero si no tenéis esperar a que se enfríe antes de hornear otra vez. 

No dejéis las galletas más tiempo del necesario en el horno, no pasada nada porque salgan un poco blandas, se endurecen al enfriarse, así que en cuanto veáis que empiezan a estar doradas, fuera.

Y vosotros ¿Cuál es vuestro capricho al que no podéis resistiros?