Si estuviésemos desayunando juntos os contaría que hoy hace un año que mi madre falleció, parece que ha pasado tanto tiempo y tan cercano a la vez, ... que me ha emocionado muchísimo leer la preciosa historia de María Midoes sobre su madre y sus recetas en el Student Journal de Aiala Hernando.
Si estuviésemos desayunando juntos os contaría que conozco perfectamente bien esa sensación de estar unidos por la cocina. Toda mi vida recuerdo la cocina, el cocinar y la comida como un lugar de reunión con la familia, no sólo con mi madre sino también con mi abuela, mis tías, mi padre y mi hermano..., toda la familia disfrutando de un vinito o una cerveza mientras todos ayudamos preparando algo. Esa cultura de compartir buenos momentos no sólo alrededor de la mesa, sino disfrutando del proceso de cocinar, y conversar, incluso los que no cocinan ;-).
Si estuviésemos desayunando juntos os contaría que yo no tengo hijas, solo #bichos pero espero saber engancharlos a ese placer tan nuestro de reunirnos en la cocina para qué, gracias a esos sabores, a esas recetas especiales de casa, hacer familia y mantener la liturgia de aprovechar esos momentos para hablar. Otra de las cosas que nos inculcó mi madre desde bien pequeños, buscar un rato al día para hablar de nuestras cosas, incluso en la etapa adolescente donde no te aguantas ni a ti mismo, siempre tenía la paciencia de hacernos hablar de nuestras cosas y mantener vivo el vínculo familiar en torno a la mesa.
Si estuviésemos desayunando juntos os contaría que una de las cosas más difíciles que me ha tocado hacer como madre, es hablar de la muerte a los niños, imaginaros la tesitura de contarles a tus hijos con el corazón roto que han perdido a su abuela, Isabel de Xanela Chic, aquí hace unas reflexiones muy acertadas de como afrontar ese momento. Fue un momento durísimo para mi y para ellos, pero fui sincera, intenté contestar a todas sus preguntas lo mejor que puede y afrontamos juntos ese duro trance. Nos ha costado casi un año que el #bichomayor pudiese hablar de sus sentimientos sobre la muerte y la pérdida, pero con la ayuda de varios libros hemos ido hablando sin presiones de lo que sentía, y de lo que le preocupaba, hemos buscado la manera de llorarla al principio, y ahora de recordarla desde la alegría de los buenos momentos. No perdemos la ocasión de hablar de ella y de recordarla, de cocinar juntos sus recetas y de contarnos todos los días entorno a la mesa, lo que nos ha hecho feliz cada día y lo peor que nos ha pasado, porque compartiendo, lo malo siempre es menos malo.
Si estuviésemos desayunando juntos os contaría que otro día os hablaré de como la echo de menos todos los días, de como voy a coger el teléfono todas los tardes para contarle como me ha ido el día, pero hoy no, hoy sólo os diré que estoy contando los minutos para reunirme con mi familia, para abrazar a mi padre, para ver a mi hermano y a mi sobri y para volver a reunirnos todos juntos alrededor de una mesa.
¡Buen fin de semana! Nos vemos el lunes.
Pd: aquí tenéis la receta de las galletas tipo príncipe caseras.

Te mando un abrazo muy muy fuerte!!! oajalá estuvieremos desayunando juntas para dartelo de verdad pero espero que te llegue todo mi cariño!!!!!!!!! Un besazo!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarClaro que me llega vuestro cariño y ayuda mucho, muchas gracias por el abrazo , lo he sentido como si estuvieses sentada conmigo, un besazo Carol!
EliminarPauli......te mando un beso enorme
ResponderEliminarMuchísimas gracias Paula! Un beso muy fuerte para tí
EliminarPauli......te mando un beso enorme
ResponderEliminarPauli......te mando un beso enorme
ResponderEliminarUn beso enorme enorme. Desde el cielo te cuida y sigue inspirando para hacer las cosas tan bonitas como tu las haces.
ResponderEliminarAins, muchas gracias, yo creo que si , un besazo
EliminarQue posteriormente más guapo... me acuerdo que hace unos meses alguien te había reñido por las faltas de ortografía. .. mira Paula, hoy no se si las tienes o no (creo que no) pero a mi me da igual. Lo que has escrito es precioso, desde el corazón y a mi me ha emocionado. Me ha tocado... Mucho ánimo. Un momento difícil para cualquiera, pero seguro que lo habéis hecho bien... un besín.
ResponderEliminarMuchísimas gracias Isabel, a lo mejor hay alguna, que con eso soy un desastre, pero de verdad que me alegro de que se note que hoy, os he abierto mi corazón , un besazo!
EliminarCreo que la única manera de cuidar a los que ya no están es recordándolos y siendo felices por ellos..., un beso muy grande.
ResponderEliminarClaro que si, yo así lo intento, por que sé que es lo que a ella le hubiese gustado, de nada sirve lamentarse, evidentemente hay días tristes pero hay que intentar verlo en positivo y seguro adelante! Un besazo
EliminarPaula, un post emocionante. Ten muy claro, y con el tiempo lo sabrás, que desde el cielo os cuida a todos; en mi caso fue mi padre el que se marchó y todos los días, absolutamente todos, me acuerdo de él, le echo muchísimo de menos y ese dolor de los primeros años consigue suavizarse, da paso a buenos recuerdos y a mucho, mucho amor; a dedicarle muchas de las cosas que haces, a charlas a solas, a pedirle ayuda, a darle gracias cuando te ha ayudado y a consolarte sabiendo que sigue pendiente de vosotros. El mejor homenaje que le puedes hacer a tu madre es llevar la vida que a ella le hubiera gustado que llevaras, es decir, una vida feliz en la que su recuerdo sea alegre y lleno de cariño. Sientete afortunada, lo eres.
ResponderEliminarQue pases un buen fin de semana.