Desde que no tengo horno he tenido que agudizar todavía más el ingenio y no puedo preparar muchos de los postres que suelo hacer, así que para una comida con amigos se me ocurrió vestir un poco la clásica crema de limón, esa que es como el bizcocho de yogurt, cada uno tiene una receta particular igual pero distinta. El resultado es un postre espectacular a la vista y al paladar, aquí tenéis la famosa crema de yogurt con limón pero vestida para un día especial con higos, frambuesas y crujiente de galleta.
INGREDIENTES:
Para la crema de limón:
- 500 grs de yogurt griego natural sin edulcorar
- el zumo de dos limones grandes
- 250 grs de leche condensada
Para el crujiente de galleta:
- 4 galletas tipo digestive
- una nuez de mantequilla en pomada
Para la cobertura:
- 4 higos grandes bien maduros
- un puñado de frambuesas
- una cucharada de miel (opcional)
ELABORACIÓN:
En un bol amplio mezclamos el yogurt con la leche condensada y el zumo de limón, hay que mezclarlo bien para que se integren bien los ingredientes y que no queden grumos. Lo reservamos en la nevera.
Precalentamos el horno a 190 ºC. Desmigamos las galletas en trozos irregulares , los mezclamos con la mantequilla, los colocamos en un recipiento apto para horno y horneamos cinco minutos hasta que quede cruijiente. Reservamos.
Para montar el plato, colocamos en boles individuales un puñado generoso del curjiente de galleta en el fondo, a continuación se pone la crema de yogur. Pelamos los higos y los cortamos en rodajas, al estar bien maduros quedan bastante deshechos, los colocamos sobre la crema con unas frambuesas, un poquito de miel y servimos.
NOTAS:
Lo bueno de esta receta es que os podéis complicar lo que queráis, podéis servirla tal cual con un poquito de ralladura de limón y ya está buenísima o hacer lo que os he propuesto yo hoy.
Es ideal también para un brunch o un desayuno un poco especial.
La cantidad de limón y leche condensada la podéis variar según como os guste la crema más ácida o más dulce.
Podéis sustituir la fruta por mermelada casera, miel o un sirope.
Al crujiente de galleta podéis añadirle, trozos de pistacho, nuez, almendra ... cualqquier fruto seco le queda muy bien. Igualmente os podéis ahorrar el paso del horno, simplemente las deshaceis en trozos con las manos y listo. Para un desayuno también podéis sustituir las galletas por granola casera.
¡Buena semana!
Tiene una pinta espectacular..
ResponderEliminarMontse mi marido es superfan, lo hago casi todas las semanas, está buenísimo y es una receta chupada!
EliminarHola Paula, lo voy a hacer en Nochebuena. Muchas gracias por la idea❤️
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