Si estuviésemos desayunando juntos, os diría que, esta semana nos hemos enterado del cierre de una marca preciosa, To the Wild, y me da pena y rabia, ver la lucha de los autónomos y de las pequeñas marcas por subsistir en este país. Me da pena que marcas que apuestan por las cosas bien hechas, de calidad, respetuosas con el medio ambiente, que se fijan en los materiales con los que hacen sus productos, en quien los fabrica, en dónde se fabrican, en los materiales con los que se envuelven, etc acaben desapareciendo porque pierdan la batalla de los precios y me da rabia, mucha rabia, ver como el gobierno es incapaz de aprobar alguna ley, alguna ayuda, algún estímulo que mejore la situación de los autónomos o de las pymes.
Si estuviésemos desayunando juntos, os diría que, esta mañana lo primero que leía mientras desayunaba, era esta reflexión de @lorabailora, Instagram haciendo publicidad en su feed de una copia china de sus productos. Esta es otra de las realidades con las que se encuentran los pequeños emprendedores. Otra realidad que muchas veces fomentamos nosotros mismos comprando copias falsas y malas en ese portal que tiene de todo.
Si estuviésemos desayunando juntos, os diría que, no es lo mismo cuando compramos un producto on line y lo tenemos en casa al día siguiente, en un paquete precioso, con una nota manuscrita y personalizada dándonos las gracias por confiar en esa marca, que el plasticucho malo envuelto de mala manera, ¿verdad? pues eso hay que valorarlo, ese buen hacer, ese tiempo y esa dedicación también cuestan dinero.
Si estuviésemos desayunando juntos, os diría que, deberíamos de ser muchísimo más responsables a la hora de consumir, y no sólo fijarnos en el precio, cuantas veces os gastáis una pasta en artículos malísimos de determinadas cadenas, en productos que vienen de China y a las que a los diez días les salen agujeros o se rompen, y en cambio racaneáis en pequeñas marcas que hacen cosas bien hechas.
Si estuviésemos desayunando juntos, os diría que, penséis, que seáis críticos y consecuentes a la hora de comprar, que no todo es lo mismo y que cada compra cuenta.
Si estuviésemos desayunando juntos, os diría que, todavía estáis a tiempo de participar en el sorteo de un precioso ramo de flores de The Colvin en mi perfil de Instagram. Me ha encantado poder poner mi granito de arena en darle publicidad a un servicio que me parece lo más. Siempre me ha encantado tener flores frescas en casa, cuando vivía en Cartagena compraba dos veces al mes flores en una pequeña floristería que tenía flores preciosas y así siempre tenía una nota alegre en casa. Donde vivo ahora me resulta bastante complicado comprar tan a menudo, así que encontrar un servicio online que pone en tu casa las flores en 24 horas, perfectamente empaquetadas, en perfecto estado, frescas y a unos precios muy razonables. Me parece comodísimo, no sólo para regalar a los demás, si no para regalártelas a ti misma de vez en cuando cuando no tienes floristerías a mano.
Y vosotros ¿cómo compráis?
Buen fin de semana, nos vemos.
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