¿DESAYUNAMOS JUNTOS? #HACIENDA somos TODOS

¡Buenos días! Hoy como todos los viernes os invito a desayunar en mi casa, ¿os animáis a coger vuestro café y tomároslo conmigo?

Si estuviésemos desayunando juntos os invitaría a que acompañáseis el café o el té con este delicioso chocolate para endulzar un poco el tema de hoy, aunque creo que me he quedado corta debería de haber añadido algún bollo.

Si estuviésemos desayunando juntos os contaría una pequeña historia, la semana pasada fui a renovar mi DNI, tuve la mala suerte de que me tocase un funcionario mal encarado de los que están de vuelta de todo, al que no sé por qué no le gusté. Primero me puso pegas con la foto, no era nueva de ese mismo día, tenía seis meses y las fotos no se pueden reutilizar, sic, tenía que haber hecho una nueva específica para eso. No sé si me vio mucho más vieja al natural que en la foto, debí preguntárselo, si tan mal me estaban sentando los traslados. Segundo no lleve certificado de empadronamiento, por qué leí en su propia web que ellos mismos a través de su programa informático pueden certificar el cambio, cosa que tampoco le sentó bien y aquí empezaron las amenazas veladas. El Sr Bicho por motivos laborales el año pasado residió en tres ciudades distintas de España, es verídico, es así, es uno de los inconvenientes que tiene su profesión, mientras el Sr. Bicho peregrinaba por España el resto de la familia permaneció en una sola ciudad por el bien de nuestra salud mental, pues al Sr funcionario esto no le debió de gustar y ahí comenzó el interrogatorio sobre nuestras propiedades inmobiliarias, que la verdad son más bien escasas y una generosa información sobre como Hacienda cruza datos y que con esta situación podía pensar que estabamos separados de facto y que lo que queríamos era defraudar.

Si estuviésemos desayunando juntos os contaría una vez más que no tengo el don de la respuesta rápida, os podéis  imaginar mi cara, un poema. Del susto inicial, pasé al cabreo monumental por no haber dicho nada y de ahí a la indignación, ¿investido de qué autoridad se atreve a amedrentarme con una supuesta inspección de Hacienda como si fuésemos delincuentes? El sábado cuando leí el artículo de Elvira Lindo, no puede sentirme más identificada con el aforismo de su padre: "El patriotismo se nota en la declaración de la renta". Yo creo y es mi humilde opinión, que el problema es el siguiente, esta familia normal y corriente, es de las que declara hasta el último céntimo que gana, de las que corre a cumplir sus obligaciones con el fisco y con la administración al segundo y es a quien amedrenta Montoro, la administración, o quien sea sino tiene todas las cosas en regla. Es la misma familia que ve con sensación de impunidad lo que defraudan o no declaran los que deberían de contribuir más al mantenimiento del estado, que para eso están los impuestos. Esa impunidad crea una gran sensación de malestar social e indignación que no cesa por que no vemos que haya sanciones para los que defraudan a gran escala, amnistías fiscales, quitas, reducciones de penas ... todo vale y mientras, en esta crisis, el Estado apretando hasta la extenuación a las clases menos pudientes.

Si estuviésemos desayunando juntos os diría que a mí no me ha gustado el amarillismo con el que se ha tratado el caso de los papeles de Panamá, ya que imagino que no todos los que salen en los mismos tienen  las mismas responsabilidades, pero creo que los que nos tocan de cerca si deberían de dar explicaciones. Creo que sí se debería de abuchear a Messi en el campo cuando se abre una sociedad al día siguiente de que en España se le multe por evasión fiscal, que algunos referentes de la cultura como Pedro Almodóvar que ganan muchos dinero con su trabajo, debería de haber dado la cara y explicar o confesar que hacía en Panamá  y en el caso de Doña Pilar, como la mujer del Cesar no sólo debe ser honesta sino parecerlo. Espero que Hacienda los investigue bien a fondo y que conozcamos después el resultado de dichas investigaciones, para bien o para mal, porque pedir dimisiones como el Primer Ministro de Islandia aquí es imposible de imaginar, lo del Ministro Soria sin comentarios.

Si estuviésemos desayunando juntos os contaría que después llegó la detención de Mario Conde. Este hombre me tiene maravillada, cómo se permitía dar lecciones de moralidad al resto de los mortales en cuanta tertulia tenían a bien invitarle, cuando va a acabar en la cárcel por segunda vez, no sólo él sino también sus hijos. Me alegra muchísimo el buen hacer de la Audiencia Nacional que ha conseguido descubrir el entramado empresarial a través del cual nos tomaba el pelo a todos los españoles en general y a los jueces en particular.

Si estuviésemos desayunando juntos os diría que a pesar de todo esto, nosotros cumplimos nuestras obligaciones con el fisco religiosamente. No sólo presentamos nuestra declaración de la renta, sino que declaramos hasta el último euro que poseemos. Yo llevo meses volviéndome loca peleándome con las distintas administraciones para lograr tener todos nuestros papeles en regla, creedme que no es fácil: los rodajes de los vehículos, los papeles de tráfico, los carnets de conducir, los padrones, los dnis, las tarjetas sanitarias, etc, etc... lo que no tengo muy claro es como comunicarle a Hacienda que durante los próximos seis meses el Sr Bicho vivirá en varias cuidades otra vez, ¿pensarán otra vez que nos hemos divorciado?

¡Buen fin de semana! Os espero por aquí el domingo.